¿Quién puede sacarte de los listados de morosos?

Fecha de la publicación: 13.09.2018
¿Quién puede sacarte de los listados de morosos?

Sin cualquier duda, aparecer en un fichero de morosidad significa enfrentarse con varios problemas. Supone automáticamente denegadas las compras a plazos, solicitudes de créditos, hipotecas y otros tipos de financiación. Incluso conseguir una línea telefónica o contratar los suministros con compañías de servicios telefónicos o eléctricos se dificulta en este caso. Si eres autónomo, los problemas se incrementan. Por lo tanto, toda la gente inscrita en las listas de morosidad busca una solución para salir de estos ficheros…

Nadie puede cancelar tus deudas

Recuerda, que si alguien ofrece sacarte de un fichero de morosidad sin necesidad de liquidar la deuda pendiente, siempre se trata de una estafa. Ninguna entidad financiera te puede proporcionar el abono de las deudas activas. Es demasiado frecuente ese tipo de fraude que consiste en proporcionar soluciones falsas para los clientes inscritos en los listados de morosos. Las empresas estafadoras buscan perfiles de personas que tienen limitado acceso a la financiación. Sale más fácil engañar a las personas que buscan préstamos online con ASNEF, ya que esta gente tiene necesidad urgente de conseguir liquidez, sin orientarse bien en el mercado financiero.

¿Cómo puedes salir de los ficheros?

Si una empresa con la que tienes una deuda te ha inscrito en un fichero, debería informarte por correo que te dio de alta en la lista. Además puedes encontrar esta información en las páginas de web de Equifax. Rellenando los datos requeridos en el formulario, conseguirás la información de crédito contenida en el fichero solicitado. Una vez hayas comprobado que figuras en una lista de morosidad, en general tienes las siguientes opciones:

  • La mejor solución para dejar de figurar en el fichero es pagar la deuda a la empresa que te reclama el pago de la deuda. Una vez hecho el pago la empresa deberá comunicar al fichero el pago y sacar tus datos. Esta es la manera más recomendable.
  • Controla si los datos están introducidos correctamente. Cualquier error en la inscripción, sea grande o mínimo, puede usarse a tu favor para dejar de pertenecer en el fichero. Si encontrarás algo incorrecto, no dudes y realiza una queja formal contra el proceso de inscripción.
  • La última opción es esperar a la expiración de la inscripción en el fichero. La expiración se lleva a cabo en un plazo de 6 años desde la inclusión de tus datos. Después te tienen que sacar del listado y no te pueden incluir por la misma deuda.

¿A dónde recurrir si necesitas financiación?

Aunque estés inscrito en un fichero de morosidad, existen opciones para conseguir financiación. Sin embargo, tendrás que cumplir unos requisitos y te enfrentarás a varias limitaciones y condiciones menos favorables.

Mini préstamos con ASNEF

Si necesitas una cantidad pequeña de manera urgente, puedes solicitar un mini préstamo con ASNEF. Se trata de un producto financiero que ofrece conseguir cantidades pequeñas de hasta 300 euros en cuestión de minutos. Como garantía vas a necesitar un justificante de ingreso periódico. Los ficheros de morosidad no importan, siempre y cuando las deudas inscritas no superen una cantidad máxima establecida por la entidad prestamista y no provengan de impagos a entidades financieras.

Préstamos de mayor cuantía con garantía

Si necesitas un importe más elevado, debes consultar las ofertas de préstamos rápidos con ASNEF o préstamos personales con garantía. Con estos productos financieros puedes conseguir un importe elevado, aunque si estés incluido en ASNEF. Dependiendo de la cantidad solicitada, deberás demostrar unos ingresos adecuados, regulares y suficientes o entregar un bien de valor para garantizar la devolución del préstamo. Las garantías más comunes son garantía de coche o garantía hipotecaria.

 

Antes de solicitar este tipo de financiación, recuerda que los préstamos y créditos disponibles para la gente inscrita en los ficheros de morosidad conllevan tanto desventajas como riesgo de sobreendeudamiento o pérdida de tus bienes empeñados como garantía.