Es posible que alguna vez te hayas encontrado en una situación de solicitar un préstamo o crédito bancario y la entidad te haya solicitado una garantía. ¿Por qué? ¿Para qué sirve exactamente una garantía financiera? Estas son algunas de las preguntas que muchos os formularéis y que vamos a ir contestando a lo largo de este artículo.

¿Qué es una garantía financiera?

Una garantía financiera o bancaria es un documento que ratifica o avala el cumplimiento de las condiciones en un contrato comercial o financiero. Es decir, es lo que le sirve al banco para asegurar que los fondos prestados serán devueltos cuando el deudor no pueda hacer frente al pago de los mismos.

Así, que tu Historial crediticio haya sido positivo hasta el día de hoy no tiene por qué eximirte de tener que presentar una garantía a la hora de solicitar financiación bancaria.

De igual modo, el hecho de presentar una garantía no exime a la entidad de proceder con el análisis habitual de la operación, es decir, a estudiar la viabilidad del préstamo según la solvencia económica del cliente, así como otras variables de riesgo que de manera habitual contemplan las entidades en su análisis.

¿Qué tipos de garantías existen?

A la hora de solicitar un préstamo, y en caso de que se nos solicite presentar una garantía financiera, existen diferentes modalidades por las que podremos optar. Es importante conocerlas bien para escoger aquella que mejor nos convenga según el tipo de préstamo bancario solicitado y nuestra situación económica actual.

Por ejemplo, ante un posible impago de deuda, ¿preferimos responder con algún bien material del que dispongamos? ¿Tenemos a alguien que nos pueda avalar la operación? ¿O nos conviene responder con nuestros fondos de inversión, depósitos a plazo fijo, etc.?