No son necesarios apenas requisitos, avales, ni papeleo y en algunos casos puedes solicitar el préstamo aunque si estás incluido en una lista de morosidad tipo ASNEF.
Son muchas las ventajas que posee este tipo de préstamos urgentes, especialmente si haces frente a unos gastos imprevistos e inevitables. Sin embargo, la mayoría de estos minipréstamos o microcréditos suelen tener un plazo de devolución corto, con un máximo de 30 días para reembolsar el importe prestado más todos los intereses. Queda claro que antes de pedir un préstamo o crédito siempre debes considerar tanto tu situación económica, como todas las condiciones del préstamo elegido. Debes atentamente evaluarlas para quedarte absolutamente seguro de que podrás devolver el préstamo al tiempo establecido.
Si a pesar de ser una persona responsable se acerca la fecha de vencimiento de tu préstamo y tú, por cualquier motivo, no dispones de dinero para liquidarlo, ¿qué opciónes tienes?
No devolver el importe del préstamo urgente
El impago de la deuda es sin dudas la peor posibilidad que puedes elegir para resolver el problema. Puesto que el impago de la deuda no cancela tu obligación de pago. Es decir, tiene lugar el efecto contrario - si no devuelves el importe del préstamo más todos los intereses correspondientes, el importe de la deuda se irá incrementando de manera progresiva. Así, cada día que pase sin cumplir con tu obligación de pago, te resultará más costoso el dinero prestado.
Solicitar una prórroga del préstamo rápido
Una prórroga significa una ampliación del plazo de devolución. Algunas entidades financieras ofrecen estos aplazamientos como una ventaja adicional. Un tiempo extra para volver a equilibrar tu situación económica y devolver tu minipréstamo sin caer en un impago. No obstante, no todas las entidades prestamistas de minicréditos urgentes incluyen esta opción. Si la incluyen, los plazos y costes que te ofrecen son distintos unos de otros según las condiciones de cada prestamista particular.